EL RETO DE CONVERTIR A LIMA EN UNA CIUDAD ECOLÓGICA

Por Ángela Chávez Miranda

Lima, nuestra capital, actualmente se encuentra contaminada. Esto se debe a que actuamos de manera irracional, pero podemos cambiar esta lamentable situación si tomamos conciencia y contaminamos menos. Tenemos muchas maneras de reducir la contaminación, como por ejemplo reciclando más, usando racionalmente los recursos que la naturaleza nos brinda y generando energía de manera natural.

En Lima actualmente utilizamos energía a base de combustible fósiles como el petróleo, pero podemos generar energía a base de los recursos naturales. Es decir, podemos por ejemplo usar la luz solar, el viento y el calor terrestre. Estos recursos de libre adquisición, se reabastecen y constituyen una fuente de energía ideal. La energía obtenida de manera natural es necesaria y urgente para Lima ya que es renovable, autóctona, abundante, limpia y disminuye las emisiones de gases de efecto invernadero.

En el caso de la energía solar, esta es generada por los rayos solares, se emplean aquí  los paneles fotovoltaicos. Estos paneles absorben la energía solar durante el día y la convierten en energía eléctrica. El viento puede también producir energía, energía eólica. Para este caso se usa aerogeneradores, que son una especie de molinos de viento, estos no contaminan y no requieren combustible. No obstante pueden generar ciertos inconvenientes a las aves y su sonido podría desorientar a mamíferos muy sensibles a sonidos de baja frecuencia, pero el beneficio de todas maneras es mayor.

Y respecto a la energía geotérmica es generada por el calor interno que se encuentra a varios kilómetros de profundidad de la corteza. En este caso, aún es muy bajo el índice de empleo pero va en aumento y es de gran beneficio para la población.

El uso de biocombustibles también es una alternativa para reducir la contaminación ambiental. En el norte de nuestro país ya se usa biocombustibles a base de caña de azúcar. Esta planta produce etanol que luego es combinada con gasolina y nos da como resultado el gasohol. Este biocombustible circulará en los grifos de Lima y en otras ciudades del país a partir de diciembre.

Lima debe cambiar y volverse ecológica por el bien de sus ciudadanos y del Perú. No contaminemos más a la capital, cuidémosla, busquemos formas viables de mejorar nuestras condiciones de vida. Sí es posible siempre que seamos conscientes de lo que en realidad queremos para nuestra casa.